Las palabras que callas te atrapan. Te hacen suyas y hacen contigo lo que gustan. Te maltratan, te abofetean y te escupen en la cara. Se sientan en una esquina de tu mente y hacen una casa de campaña. Te patean en la cara. Te despiertan en las noches hablándote en voz alta. A veces te hacen sentir bien. Son tuyas y nadie te las puede arrebatar. Conversas con ellas y se ríen contigo como buenos amigos. Comen juntos y vas con ellas al cine. Eventualmente te traicionan y te dan la espalda. Vuelven a donde pertenecen. En aquél rincón donde se sienten cómodas. Fotografía: @xgibran